El Colegio Oficial de Veterinarios de Almería acoge la Presentación del informe emitido por la Real Academia de Ciencias Veterinarias de Andalucía Oriental
El Colegio Oficial de Veterinarios de Almería sigue con su firme compromiso con la formación de sus colegiados y ha organizado, junto con la Real Academia de Ciencias Veterinarias de Andalucía Oriental (RACVAO), la jornada de presentación del informe ‘Rabia. Recomendaciones sobre la gestión del control de animales susceptibles: el papel de los Colegios de Veterinarios como entidades coordinadoras. Modelo para otras emergencias sanitarias’.
La rabia continúa siendo una de las zoonosis más (grandes) graves a nivel mundial. En nuestro país, desde el mes de septiembre del año pasado ya son 10 los casos de perros diagnosticados en Melilla con dicha enfermedad, lo cual debe de ser un importante motivo para no olvidar el peligro que la misma supone. Ante esta situación, la Real Academia de Ciencias Veterinarias de Andalucía Oriental, como entidad científica, ha emitido un informe “Rabia. Recomendaciones sobre la gestión del control de animales susceptibles: el papel de los Colegios de Veterinarios como entidades coordinadoras. Modelo para otras emergencias sanitarias” donde realizan una serie de reflexiones y aportan un conjunto de ideas, que emplazan a los Colegios Veterinarios a ser pieza clave central organizativa entre los clínicos y la administración. A través del mismo también quieren reivindicar EL PAPEL DE LOS VETERINARIOS como sanitarios y la relevancia que tiene la profesión dentro de un mundo One Health (salud animal, salud pública y salud ambiental).
“De las 513 agresiones por animales notificadas en un año, el 63% de los perros agresores y el 78% de los gatos estaban sin vacunar de rabia. Hasta ahora los veterinarios hemos informado acerca de la importancia de la vacunación obligatoria, pero es urgente que desde aquí salga un plan conjunto en el que se impliquen las administraciones”, ha señalado Yasmina Domínguez, presidenta del Colegio Oficial de Veterinarios de Almería.
Por su parte, el director general de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, Jose María de Torres, ha destacado la importancia de la vigilancia, control y prevención de esta enfermedad mediante cambios importantes como la observación antirrábica de animales agresores potencialmente transmisores desde las clínicas veterinarias, el control de perros y gatos vagabundos, insistir en la vacunación obligatoria de perros, gatos y hurones, que los municipios se doten de centros para la cuarentena de animales sospechosos o el control de la eficacia de la vacunación de animales importados de países terceros mediante serologías.
“No hay que olvidar nunca que la rabia es una enfermedad de evolución lenta y poco contagiosa, lo que facilita la adopción de medidas de prevención efectivas, que requiere que siempre, ante un animal sospechoso, la instauración de un periodo de observación que puede oscilar entre los 14 días para animales mordedores y los 3 o más meses para animales provenientes de zonas endémicas”, ha asegurado Rafael Serrano, presidente del Colegio Oficial de Veterinarios de Melilla.
Por otro lado, en relación directa con la temática de las zoonosis, las medidas de bioseguridad y el enfoque “One Health: “Todas las profesiones sanitarias, incluidas la veterinaria, tenemos como fin último garantizar la salud. Cada nueve minutos, muere una persona de rabia en el mundo”, ha apuntado Santiago Vega García, catedrático de Sanidad Animal. Facultad de Veterinaria. CEU de Valencia.
Asimismo, Antonio J Villatoro, presidente de la Real Academia de Ciencias Veterinarias de Andalucía Oriental, ha querido poner de manifiesto la relevancia de los datos del informe sobre la rabia: “Las zoonosis representan entre el 60 y el 65% de las enfermedades infecciosas que afectan al hombre. En este primer informe queremos aportar nuestro grano de arena en los mecanismos de control de este complejo problema a través de una serie de recomendaciones para que la actuación profesional veterinaria adquiera, a través de sus profesionales y sociedades científicas, la relevancia que tiene dentro de un mundo One Health (Salud animal, salud pública y salud ambiental)”, ha precisado.
Sobre la Rabia
La rabia es una enfermedad vírica que afecta al sistema nervioso central. Los animales enfermos (tanto domésticos como silvestres) pueden transmitirla a los humanos fundamentalmente a través de mordeduras, arañazos o contacto íntimo con su saliva y heridas abiertas o membranas mucosas. En circunstancias especiales, se ha descrito la transmisión aerógena a través de aerosoles inhalados con una alta concentración de virus en suspensión, generalmente en cuevas donde habitan murciélagos en los que una considerable proporción se encuentran infectados. Dada la importancia de la rabia desde el punto de vista de la salud pública, esta enfermedad está sujeta a vigilancia y a notificación obligatoria y urgente.
España es un país libre de rabia, según la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA). Sin embargo, su situación geográfica como zona de paso entre Europa y países endémicos, el intenso tráfico de personas y animales y la constatada circulación de Lissavirus europeo de murciélagos (EBL-1) entre los quirópteros de distintas especies en España, hacen posible la aparición de casos en animales, que a su vez se podrían transmitir a las personas. En zonas como Ceuta y Melilla, dada su localización cercana a Marruecos, donde es endémica, esta enfermedad sigue estando presente, por lo que la posibilidad de importación a la península ha aumentado en los últimos años por el flujo de personas que llegan a España a través del Estrecho de Gibraltar y por la libre circulación en la Unión Europea. Es por ello que en Andalucía, la Orden de 19 de abril de 2010, establece la obligatoriedad de la vacunación antirrábica en perros, gatos y hurones, debiéndose efectuar la primera vacunación a partir de los tres meses de edad de los animales y revacunaciones anuales.
Por contra, en comunidades como Cataluña, País Vasco, Galicia o Asturias no es obligatoria la vacunación antirrábica. A consecuencia de la guerra en Ucrania, teniendo en cuenta la incidencia de esta enfermedad en este país y para atender la posible venida de animales que acompañen a los refugiados, el Consejo Andaluz de Colegios Oficiales de Veterinarios en coordinación con la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha organizado un voluntariado veterinario, prestando especial atención a la vigilancia de la rabia. La celebración de estas Jornadas, por parte del Colegio de Veterinarios de Almería, suponen una oportunidad de actualizar los conocimientos de los profesionales, sobre la etiología y situación a nivel nacional y comunitario.